I
mitad de mes
y de nuevo vuelven a quedar
en segundo plano
las dietas, ejercicios
y recuperar la dignidad
al menos
ya no le abro las piernas
a cualquiera que me guste
y lo mismo con los besos
el gusto por la cerveza y el vino
disminuye
menos por el de las flores
quizás porque no me las regalan
adoro las margaritas
y a veces me siento como un florero
y aunque ya no escribo
ni leo poemas de amor
de vez en cuando
uno o dos o más
"te quiero"
no me vendrían
nadita mal